Los ordenamientos de Morena no conceden “permisos” a dirigentes para separarse del cargo, ni permiten a éstos que ocupen cargos públicos
Por: Marcial Campuzano
El exdiputado local Jacinto González Varona podría ser destituido como dirigente estatal de Morena, al reincorporarse como diputado y al separarse del cargo partidista, toda vez que los estatutos de ese partido no prevén las figuras de permiso ni ausencia temporal para dejar acéfala la dirigencia, y establecen que ningún integrante del Comité Ejecutivo Estatal podrá ocupar cargos en ninguno de los 3 órdenes de gobierno, y el Congreso es uno de los poderes que integra el gobierno estatal.
El ex representante del Partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) ante el Instituto Electoral y de Participación Ciudadana, Sergio Montes Carrillo, dijo que cualquiera de los 89 consejeros estatales de Morena que aspire a dirigir a ese partido, podría mediante la impugnación destituir a Jacinto González porque abierta y veladamente violó los estatutos.
Sergio Montes dijo que en los estatutos que estaban vigentes en el último Congreso morenista, no existe en ninguno de los 70 artículos que lo integran, ninguna figura que autorice permiso o ausencia temporal del presidente del partido por cuestiones de cualquier índole, “ni por salud, trabajo, problemas familiares o por reincorporación a alguna actividad”.
Aclaró que en el último Congreso fueron modificados los estatutos y pudo haber sido modificada esa parte, pero que la violación persiste porque de ser el caso, los nuevos estatutos aún no surten efecto porque no han sido registrados ante el Instituto Nacional Electoral, con lo que oficialmente no están activos.
Si bien Jacinto González Varona está en su derecho reincorporarse a las funciones de diputado en el Congreso local, en apego a los reglamentos internos del Poder Legislativo, “en automático dejó vacante el puesto de presidente del partido porque no hay ninguna figura jurídica que establezca que puede ausentarse del partido por permiso”.
En sentido positivo, agregó, él está en todo su derecho de regresar a desempeñar el cargo de diputado, pero no puede ocupar 2 sillas, tiene que ocupar sólo una; es decir no puede estar en funciones como legislador y simultáneamente ser presidente de Morena en Guerrero, explicó.
Montes Carrillo dijo que lo anterior obedece a que los estatutos de Morena, no permiten que el presidente del partido ocupe a la vez algún cargo público en ninguno de los 3 órdenes de gobierno.
Los estatutos establecen claramente que “ningún integrante del Comité Ejecutivo Nacional y Estatal pueden pertenecer a ninguno de los 3 niveles de gobierno, y el Congreso del estado es uno de los poderes del gobierno, con lo que en automático renunció a la presidencia del partido”, manifestó.
Si Jacinto González solicitó su reincorporación como diputado, en automático renunció como dirigente estatal de Morena, “lo cual significa que la presidenta del Consejo Estatal de Morena Marcia Elsa Valencia Guzmán, debe convocar a un Consejo extraordinario para que los 89 restantes consejeros estatales morenistas alijan a un nuevo presidente, indicó.
Señaló que la presidencia del partido Morena no se hizo para que su titular entre y salga las veces que quiera, “por lo que con su reincorporación como diputado se entiende que Jacinto González renunció a la presidencia, así se debe de entender”.
Dijo que alguno de los 89 consejeros estatales de Morena que aspire a la dirigencia estatal, puede impugnar el regreso de Jacinto González Varona como líder de ese partido en Guerrero, primero ante los órganos internos de ese partido y después ante los tribunales electorales local y federal, y con facilidad Jacinto sería desconocido o destituido como dirigente porque no está la figura jurídica de permiso en los estatutos.
Aclaró que los consejeros estatales de Morena sí pueden ocupar cargos en cualquiera de los 3 órdenes de gobierno, no así los integrantes del Comité Ejecutivo Estatal.